Mucho se ha especulado sobre el uso de tacones altos y la aparición de várices en las piernas, sin embargo, no existe ninguna evidencia científica que así lo demuestre.
Lo que sí es conocido es que el dolor y la pesadez que se presentan en algunas pacientes con várices puede incrementarse cuando usan tacones altos, particularmente de 10 cms o más, porque al caminar con estas ¨agujas ¨la sangre no es bombeada tan efectivamente de regreso al corazón por la bomba muscular de la pantorrilla.
En otras palabras, los tacones no hacen aparecer a las várices; sin embargo, si pudiesen generar lesiones osteoarticulares a nivel de piernas y piés tal y como lo reseña el diario El Comercio de Lima.