Al ver la pierna se nota que una úlcera ya cicatrizó

 

C5CLa mayoría de los pacientes reconocen fácilmente la presencia de várices o arañas vasculares, pero no asocian los cambios descritos anteriormente y mostrados en las fotografías, como casos avanzados de insuficiencia venosa crónica. Al igual que en los casos de enfermedad C2, C3 y C4, están en riesgo de padecer una tromboflebitis superficial y/o una thrombosis venosa profunda.

Los cambios de piel, como los ilustrados en estas fotografías, lucen similares a los de pacientes con enfermedad C4. Las úlceras varicosas una vez que cicatrizan dejan el tobillo tal y como lo vemos ejemplificados en las fotografías anteriores, estos pacientes tuvieron una úlcera varicosa que finalmente cicatrizó o cerró.

El reflujo en la vena safena interna de larga data puede conllevar a la aparición de úlceras varicosas. Más raramente, la obstrucción de las venas profundas no es debida a la presencia de un trombo en su interior, sino a la compression extrínseca o externa de la misma generalmente a nivel de la pelvis, en las venas ilíacas, bien sea por tumor; o, por una variante anatómica en donde la vena ilíaca es comprimida por la arteria del mismo nombre en una condición conocida como Sindrome de May Thurner, debido a esta compresión el drenaje venoso de la pierna se enlentece, aumenta la presión venosa que eventualmente puede conllevar a los cambios en la piel del tobillo que terminan en la aparición de una úlcera.

 

TratamientoC58

  • El tratamiento comienza con la visita a un médico especialista
  • Las molestias pueden mejorar significativamente con el uso de medicinas, gracias a su efecto antinflamatorio y/o medias de compresión graduada, las de alta compresión (30-40 mm de Hg) son muy efectivas en el control del edema y el dolor, así como evitando la reaparición de la úlcera
  • Se recomienda hacer ejercicio en forma regular, las caminatas constituyen parte importante del tratamiento así como la natación
  • Una adecuada hidratación de la piel del tobillo es parte fundamental del tratamiento
  • El ultrasonido doppler realizado durante la evaluación generalmente demuestra que la raíz del problema no es visible a simple vista, se localiza muy por debajo de la piel, en una vena safena incompetente, o en una vena profunda con trombosis o reflujo, por ejemplo
  • El tratamiento invasivo ideal de la insuficiencia venosa en los casos no complicados incluye la combinación de microflebectomía y ablación endovenosa con láser de la safena incompetente si ese fuera el caso
  • Si se diagnostica una trombosis venosa profunda, la anticoagulación es de primerísima importancia, particularmente para reducir la severidad de sus posibles complicaciones. El tratamiento definitivo de las várices se difiere por unos meses hasta terminar el tratamiento anticoagulamente y una vez verificado por ultrasonido doppler que no hay trombosis venosa profunda residual.
  • Si se sospecha una compresión extrínseca de las venas profundas a nivel pélvico, la evaluación de la fase venosa de una angiotomografía de abdomen y pelvis es sumamente útil para establecer el diagnóstico y planificar el tratamiento